Con estas imágenes es fácil comparar “la limpieza” efectuada, tanto en lo que se refiere a quien fue, quién la montó en 1983 y quién la ha reemplazado (por rotura) en el 2008 después de que fuera solicitada a la Fundación su restitución por parte de algunos historiadores.
Ver ampliada la imagen adjunta
El azulejo del monolito. ¿la botella medio vacía o medio llena ?
Las tres fotografías están secuenciadas cronológicamente. La primera es la actual, la segunda coincide con el escrito de Fernando, Laureano y José Lúís y la tercera es la que puso la CNT-Andalucía. Para compararlas es aconsejable ampliarlas. Está claro, cualquier tiempo pasado fue… anterior.
Los que nos ganamos la vida dando clase de historia tenemos que dedicar una buena parte de nuestras energías a explicar que en cada momento hay unas circunstancias distintas y que no se puede enteder tiempos pasados desde contextos actuales. Así, surge siempre el dilema de que si la historia va a mejor, si el progreso es cosustancial a la evolución del hombre. Una reducción simplista, triunfadora y, a veces política, de la cuestión nos conduciría a un optimismo desmesurado en ese sentido. Siempre sostengo que no hay ni blanco, ni negro, sino distintas gamas cromáticas de grises y que los hechos son muy matizables, al mismo tiempo que complejos y diversos. Hoy me han llamado por teléfono y me han dicho que en la plaza de los jornaleros, al monolito de la CNT le habían colocado el azulejo con la poesía de Miguel Hernández. De hoy mismo es la primera foto que aparece en este artículo. Ciertamente, es un paso hacia adelante, pero también es verdad que no aparece con la firma de la CNT-Andalucía, como en el original, y que está desplazado de su entorno natural ; la Alameda. Obviamente, menos da una piedra, y el monolito de Carlos Fraga está mucho mejor con el azulejo que sin él. El año pasado, con motivo del 74 aniversario, el Ayuntamiento de Benalup-Casas Viejas y la asociación Ben-alud organizaron una serie de actividades entre las que destacó la mesa redonda en la que participaron José Luís Gutiérrez, Fernando Sigler y Laureano Rodríguez, de allí salió la iniciativa de solicitar la reposición del azulejo tradicional y su reubicación en la Alameda. Luego los tres mandaron una carta firmada por ellos a la fundación. Decía así el encabezamiento : “Estimados amigos… Esperemos que las promesas y buenas intenciones con las que ha nacido la Fundación se vayan convirtiendo en realidad.
La cuestión de la vuelta del monolito y el azulejo a su lugar original es una buena piedra de toque para calibrar la voluntad. La memoria de Casas Viejas, la propia vida de hoy no es exclusiva de nadie. En 1983 pocos se acordaron de los Sucesos y quienes lo hicieron tiene derecho a que su voluntad sea respetada. Y el pueblo también a conocerla.
Un cordial saludo”
Hoy un año después se ha colocado el azulejo, sin la autoría y dejándolo en la plaza de los jornaleros. El hecho no ha tenido difusión alguna. En 1983 estos militantes anarquistas sentaron un gran precedente en la recuperación de la memoria histórica de todos los españoles. La reivindicación de los tres historiadores citados parece haber tenido efectos positivos. Hoy, en 2008, ¿vamos hacia adelante o hacia atras como las tortugas ?. ¿Está la botella medio vacía o medio llena ? No sé, lo que si tengo claro es que la botella está media y se podría llenar. Costaría tan poco…
Publicado por Salustiano Gutiérrez Baena en
historiacasasviejas.blogspot.com
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