… Y EL ALCALDE SE PUSO EN JARRAS

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Tras meses sin autorizar la petición de RMHSA de CGT-A, el Ayuntamiento de Medina Sidonia anuncia sorpresivamente que actuará en la búsqueda de los guerrilleros Bernabé López Calle y Juan Ruiz Huércano.

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Este grupo se congratula del cambio de actitud y pide que se tenga en cuenta a los familiares y al movimiento memorialista.

RMHSA (CGT-A) | Sevilla | 11-1-2016

El sainete de la intervención en el cementerio de Medina Sidonia ha tenido un nuevo acto este fin de semana. Recordemos para los no iniciados. En noviembre de 2014 el Grupo de Trabajo Recuperando la Memoria de la Historia Social de Andalucía (RMHSA) de CGT-A presentó un

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Proyecto para realizar los trabajos preliminares de indagación y localización de una fosa común de la posguerra en el Cementerio Municipal de Medina Sidonia (Cádiz)


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firmado por el historiador

Luis García Bravo

, que también ostenta la representación de la familia, y el arqueólogo

Jesús Román Román

. Intención que se comunicó al Ayuntamiento de Medina de forma verbal en diciembre de 2014 y por escrito durante abril de 2015.

El 25 de mayo de 2015, siete meses después de la propuesta, recibimos un escrito en el que el Ayuntamiento asidonense exigía la presentación, en el plazo de 15 días, de una autorización previa de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía por la protección especial que cuenta el conjunto histórico de Medina Sidonia. Si así no se hacía, se daría por desestimada la solicitud y se finalizaría el expediente.

Una exigencia absolutamente insólita que, a nuestro entender,  ponía de manifiesto la falta de voluntad municipal para afrontar el reto. Por el contrario explicitaba que, por lo menos, no se quería que RMHSA llevara a cabo la localización y dignificación de los restos de los guerrilleros anarquista y comunista. Así lo indicamos en un escrito hecho público unos días después. De todas formas, en él manifestábamos nuestra voluntad de seguir con el proyecto y de cumplimentar la exigencia que se nos hacía.

El 8 de junio, a través del arqueólogo Jesús Román, presentamos la solicitud en la Delegación Provincial de Cultura de Cádiz

. Por supuesto que no se nos respondió en los quince días exigidos. Así que el expediente quedaría cerrado. Pasado el verano contactamos con la delegación gaditana y esta nos comunicó, como pensábamos, que no sabían muy bien qué hacer ante tan insólita petición. Es más, compartía la idea de que no era necesaria en absoluto ninguna autorización de esas características para el lugar donde se quería intervenir. Así que llegamos al acuerdo de que le presentaríamos el proyecto con una mayor delimitación del lugar a intervenir y que si la delegada asumía el parecer técnico extendería el oportuno certificado de que su intervención no era necesaria en absoluto.

Así se hizo el 5 de octubre del 2015 y el 27 de ese mes

la Delegación de Cultura nos remitió un escrito en el que decía que no era necesario su permiso para la intervención prevista

. Así que el 18 de noviembre le volvimos a pedir permiso al Ayuntamiento de Medina para realizarla. Así mismo le solicitábamos un local para, en torno a la fecha del asesinato de los guerrilleros, realizar una actividad conmemorativa. El silencio fue la respuesta recibida. Así que, a mediados de diciembre, iniciamos los preparativos para realizar el acto en el mismo cementerio y en una comida de confraternización que, a la vez, sirviera de conmemoración y recordatorio de la petición de intervención.

El silencio municipal se rompió la víspera del acto, la tarde del viernes 8, con una nota en la que el portavoz del gobierno municipal, Santiago Gutiérrez, anunciaba que había iniciado los trámites para intervenir en la fosa de los guerrilleros. Una «excavación» que continuaba con el reconocimiento de la memoria de las víctimas de la represión franquista en el municipio comenzado con el monolito que ya exista en el cementerio. Además, para que no falte de «ná», también anunciaba que la Concejalía de Urbanismo estaba profundizando «en el estudio documental de la posible fosa común existente en el cementerio municipal, de cara a su localización definitiva mediante una serie de sondeos arqueológicos que pretenden finalmente proceder a excavación y recuperación de los restos mortales depositados en ella». Gutiérrez remachaba que el proyecto permitiría «dar luz a una parte de nuestra historia, dignificando y recuperando la memoria de las personas que dieron su vida por la democracia en nuestro país».

La casual fecha elegida para la publicación de la nota indica que, por fin, el gobierno del Ayuntamiento de Medina, con su alcalde a la cabeza, ha decidido pasar a la acción, remangándose y poniéndose en jarras para afrontar el reto memorialista de forma decidida.

El Grupo de Trabajo RMHSA de CGT-A no puede menos que alegrarse

de la conversión de las autoridades municipales, de su empuje y amplias perspectivas. Ni siquiera nos importa que, una vez más, se nos aparte, que se nos  ningunee. De hecho, estamos pensando, ante la repetición de la situación, que los 1500 euros que podíamos gastar en la intervención deben de tener alguna virtud taumatúrgica. Es la tercera vez que obra el milagro de que, tras anunciar nuestra propuesta, una administración interviene de forma decidida para hacerse cargo por completo del proyecto. Ocurrió en Zalamea la Real (Huelva), en Paterna (Cádiz) y ahora en Medina Sidonia.

De todas formas nos permitimos dar unos desinteresados consejos a los munícipes asidonenses:

· El primero,

que tenga en cuenta a las familias

. Que antes que nada se ponga en contacto con los familiares de López Calle y Ruiz Huércano. A los actos del pasado sábado acudieron los del segundo por primera vez.

· El segundo,

que tenga en cuenta al equipo previsto por este grupo para llevar a cabo la intervención

. Le podrá guiar en una «excavación» que no es una de romanos o árabes. Seguro que le ayudará mucho.

· El tercero y último,

que lleve la actuación de forma transparente y pública

. De forma que conozcamos los resultados y podamos, todos juntos, igualmente dignificar y recuperar la memoria de esos anarquistas y comunistas que dieron su vida por una sociedad mejor. Este grupo no busca ningún protagonismo ni rédito político. En este mundo todos sabemos quiénes somos y dónde estamos. Pero también tenemos nuestro corazoncito y más en este caso que sentimos propio.

Finalmente, queremos expresar nuestro agradecimiento a las varias decenas de personas que asistieron al acto del cementerio y a la comida que le siguió. Fue una conmemoración sencilla, salida de las entrañas de quienes llevamos muchos años luchando por la memoria histórica. ¡Muchas gracias y vivan por siempre López Calle y Ruiz Huércano!