Después contamos con la oportunidad de proyectar el documental “Lucio”, que quien esté interesado ya puede adquirirlo pues se puso a la venta el mismo día 27 de mayo. Al final de la proyección, a la que acudieron más de un centenar de personas, y después de un comentario a cargo del mismo Lucio Urtubia en cuanto a su visión personal sobre el pasado y el presente de la sociedad, pudimos plantearle las distintas preguntas que al personal se le ocurrían, que entre otras cosas aludiendo a las diferencias entre CNT y CGT, opinó que “aquí nadie somos ni ángeles ni demonios” pero que sin perder las identidades deben caminar en busca de la misma finalidad. Las preguntas se fueron prolongando hasta apurar el tiempo que teníamos establecido y algo más. Una vez concluido seguimos charlando durante la cena y también al día siguiente hasta que le llegó la hora de coger el avión que le llevaría a París donde el reside, pero que después debería coger de nuevo para volver a Vigo y continuar de manera incansable hablando del anarquismo, tanto por Europa como por sudamérica, como ha estado haciendo recientemente y donde le han dejado un agradable sabor de boca, y también haciéndonos un llamamiento a la mejor utilización de los medios de que disponemos, pues como él nos decía, “no estoy en contra de las riquezas, sino en contra de su mala utilización”.
Aparte de todo esto, hay que lamentar el caso omiso que hicieron los medios de comunicación a pesar de haberles insistido en más de una ocasión, pero desgraciadamente en esta ciudad ya estamos acostumbrados a ver los periódicos llenos de estupideces y noticias que no le interesan a nadie, debido al sometimiento que los políticos hacen de los medios de comunicación.
Al día siguiente tuvimos el orgullo de contar entre nosotr@s con Carmen Bueno, la viuda de Eduardo de Guzmán, Carmen, persona encantadora donde las haya y con sus noventa años recién cumplidos llevados de manera espléndida, tuvo la amabilidad de venir desde Madrid para hablarnos de ese gran periodista y escritor que era su marido, además de resaltarnos todos los valores que tenía como persona y como trabajador. También estuvo acompañada de Manuel Blanco Chivite, director de la editorial Vosa que está teniendo la consideración de reeditar los libros de Eduardo de Guzmán, y que también nos habló de la figura del que llegará a ser redactor-jefe del diario La Tierra con sólo veintidós años y premio internacional de la prensa con su libro “El Año de la Victoria”.
Después y al igual que el día anterior, continuamos con la conversación durante la cena y nos despedimos hasta el diecisiete de junio pensando en volver a vernos en Villada, pueblo natal de Eduardo de Guzmán donde se celebrará un homenaje a tan culta persona.
