Berneri no es solamente una víctima. Sus inquietudes, sus críticas, su sed de construir movimiento serio hacen que haya marcado profundamente el análisis de la revolución española. Algunos de sus pensamientos son profundamente actuales y es interesante recordarlos.
“Nos hemos resignado a ser las víctimas de todas las locuras, extravagancias, exageraciones de algunos que, con el pretexto de lógica, han pretendido no solamente justificar todo lo que los burgueses tienen de indecente y de rechazable, sino también impedir y demoler todo la obra de reconstrucción comenzada por otros camaradas (…) En cuanto al sindicalismo, yo creo que es el único terreno sobre el cual podremos construir alguna cosa, aunque yo no pueda aceptar los funcionarios sindicales y que vea los numerosos inconvenientes y peligros del anarco-sindicalismo en la práctica” (Julio 1930).
“La confianza excesiva en las masas a detenido y desviado la función de destacamento de vanguardia de los anarquistas, que se han dejado engañas con la ilusión de que el “pueblo” podía rebelarse sin una serie de factores preparatorios de una atmósfera revolucionaria. (…) En la acción, algunos anarquistas han pasado del anarco-sindicalismo, no solamente para participar en la vida de las masas, sino también para tener experiencias personales” (Octubre 1930).
“Todo intelectual debería, como ha dicho Salvemini en su hermoso discurso en el Congreso mundial de intelectuales, tomar como divisa las palabras de Voltaire : “Señor abad, estoy convencido que vuestro libro está lleno de tonterías, pero daría la última gota de mi sangre por aseguraros el derecho a publicar vuestras tonterías” Cuando en el transcurso del último congreso mundial de la AIT, yo decía a los delegados españoles que era necesario considerar el anticlericalismo defendido por la CNT y por muchos elementos de la FAI como no anarquista, y que uno de los factores del éxito de las corrientes fascistas era este anticlericalismo, tenía en mis manos un texto redactado por los anarquistas españoles donde se preconizaba la prohibición de las prácticas culturales aunque tolerando los sentimientos internos (como si estos sentimientos no fueran totalmente libres bajo el talón de Mussolini, de Hitler o de Stalin). (…) Malatesta comentaba (un atentado atribuido a un anarquista) ¿es heroico haber matado mujeres, niños, hombres sin defensa porque eran católicos ? Eso es peor que la venganza : es el furor enfermizo de místicos sanguinarios, es el holocausto sanguinario sobre el altar de dios o de una idea lo que viene a ser lo mismo” (1936)
Durante la revolución española, sus análisis, como Cuidado, giro peligroso, carta abierta a Federica Montseny, publicados en el periódico italiano Guerra de clases por la CNT, hacen de Berneri un estorbo. El escribe en su diario personal : “El artículo del número seis ha irritado al cónsul general de la URSS en Barcelona, que ha preguntado al comité regional si lo aprobaba. No sé lo que han respondido” (Enero 1937) ; “El número ocho de Guerra de Clases saldrá cuando se pueda. El comité (regional de Catalunya) ha actuado como con La España antifascista (supresión de papel), y yo no quiero ser acusado. Sin embargo, la cuestión me ha apenado un poco. Lo compensará colaborando en revistas y escribiré folletos” (Enero 1937)
Es esta voz, censurada por una parte, asesinada por la otra, que nosotros debemos tener.
Frank Mintz
CNT 91
Combat Syndicaliste – Février 2008
Confédération Nationale du Travail