CeAqua/Plataforma galega
Se entregaron en el Consulado argentino de Vigo. Entre ellas se encuentra la de dos militantes de la CNT
https://www.ceaqua.org/5-nuevas-querellas-se-incorporan-a-la-querella-argentina/
Cinco historias que buscan justicia
Atlantico/Ana Baena
photo_camera Carlos Abella fue el único de los cinco que logró sobrevivir.
Las familias de Bernardo Mato, Carlos Abella, Celestino Carbia, José Lijó y José Sieria, represaliados por el franquismo, entregarán la documentación para sumarse a la querella argentina en el proceso iniciado en 2019
Familiares de cinco represaliados de la provincia, representantes de CeaQua, de Avogados Novos y María Ortega, diputada de Memoria Histórica acudirán esta mañana a entregar nueva documentación al Consulado argentino. Suman cinco casos nuevos a la querella que desde el juzgado nacional de Argentina investiga los crímenes lesa humanidad cometidos por el Estado español desde el golpe del 36 hasta la Transición. Son cinco historias de vidas frustradas: la del Celestino Carbia, ex-alcalde de Valga, fusilado en Monte Porreiro; el maestro de escuela en Teo, Bernardo Mato, asesinado extrajudicialmente en 1936; el defensor de la República, José Lijo, fusilado en 1937 y los sindicalistas de la CNT, José Sieria, asesinado y Carlos Abella, computada la pena de muerte por cadena perpetua.
El deseo común de las familias es la búsqueda de justicia, visibilizar el caso de sus allegados y dar luz sobre sus vidas. Manuel, nieto de Celestino Carbia, sigue en la lucha tras el fallecimiento de su tía Hermitas y su padre, Francisco. “En casa se hablaba muy poco de mi abuelo, mi padre tenía 8 años cuando lo fusilaron e iba a visitarlo a San Simón, no quiso volver ni para un homenaje; tuvo que embarcarse porque aquí nadie la deba trabajo y cada vez que pasaba en tren por delante de las islas se imaginaba a su padre; quedó muy traumatizado”.
Iria Morgade quiere que saber quiénes fueron los responsables de la muerte de su bisabuelo, Bernardo Mato. “Creo que él pensaría que es nuestra obligación, murió después de tenerlo secuestrado los falangistas durante días, no solo le quitaron la vida, sino aniquilaron su legado, porque hasta el año 2000 no se sabía casi nada; estaba en las misiones pedagógicas y desde que emigró a Cuba fue muy activo en política y cultura, pero todo eso fue borrado con su muerte”. Morgade lamenta que tengan que buscar justicia fuera de España.
Andrés Lijó se emociona cuando recuerda al hermano mayor de su padre, José Lijó. “En mi casa nunca se habló del tío, era un tema tabú; con el paso del tiempo, nos fuimos enterando de cosas y llegamos a la conclusión de que la condena fue una maldad, una vergüenza; este paso es muy especial para nosotros”.
Dolores Sanless, nieta de José Sieria, cumple lo que cree sería el sueño de su abuelo. “En mi familia aún hay quien no quiere tratar del tema, mi madre siempre tuvo miedo, era señalada como la hija de un rojo; solo conseguimos saber algo a través de unas cartas y de un diario que guardó mi abuela; también encontramos una nota por detrás de una foto en la casa de un camarada, donde les pedía que cuidasen de su familia; con este proceso se le da visibilidad a su caso y se reconocen sus derechos”.
Carlos Abella fue el único de los cinco que logró sobrevivir. Su pena fue conmutada por cadena perpetua y a los siete años salió en libertad, aunque tenía que firmar cada quince días. Desde León lo desterraron y llegó a Fisterra, donde conoció a su mujer. “Siempre fue el rojo, pero era un alma libre, nunca consiguieron doblegar su espíritu”, afirma su hija Nela, que 20 años después de su fallecimiento espera poder limpiar su nombre. “Para nosotros es una satisfacción entrar en la querella”.
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