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Tenemos que refrescar nuestra memoria, pues en estos días hace diez años que en El Bosque (Cádiz) las familias de fusilados de Ubrique, Benamahoma, Grazalema, etc. impidieron el expolio de una fosa común, por parte de un Ayuntamiento de izquierdas.
http://www.todoslosnombres.org/php/verArchivo.php ?id=1373
Aunque hay que decir que en esta ocasión el Ayuntamiento, la Diputación y algunos altos cargos del gobierno andaluz por lo “bajini” colaboraron activamente, una vez paralizada las obras por las familias. El objetivo era intentar que la intervención de exhumación fuera técnicamente lo mejor posible, dada la nula experiencia que se tenía.
Foto : Primera fase. Enero 2004. Trabajos de exhumación de la fosa común.
Una vez que el Ayuntamiento resolvió su problema (construir sus nichos) las instituciones retiraron a los técnicos y obreros logrando la paralización de los trabajos. Tuvo que pasar más de un año para reiniciar las tareas y poder acabar el trabajo, inhumando los restos en los cementerios de Ubrique y Benamahoma. Este último creó el precedente de una celebración oficial con el máximo protocolo que se establece para un entierro (días de luto oficial, bajada de banderas, exposición de féretros en salón de plenos, etc.).
http://www.youtube.com/watch ?v=CcdEGJPJTCo
Evidentemente el informe oficial tardó mucho (demasiado) en hacerse público y, claro está, no hacía mención al origen que forzó esa intervención, algo así como “si, por la gracia, el espíritu santo señalara el camino a los funcionarios y cargos políticos de cuándo y cómo intervenir”.
http://www.elmundo.es/cronica/2004/431/1074518895.html
En esta primera intervención pública y publicitada, en una FOSA COMÚN DEL FRANQUISMO los técnicos eran empleados públicos (funcionarios y/o laborales), lo que a muchos se les olvidó rápidamente. El precedente NO PODÍA CONVERTIRSE EN NORMA, como así ocurrió posteriormente, con excepción de algún caso extraordinario.
Lamentablemente, el “expolio” sigue formando parte del método MÁS EFECTIVO para deshacerse de las fosas comunes del franquismo en Andalucía por parte de los propietarios de cementerios (ayuntamientos e iglesias).
